jueves, 31 de marzo de 2011

Fidel Castro, sobre Fukushima.

El desastre de Japón y la visita de un amigo

Hoy tuve el gusto de saludar a Jimmy Carter, quien fue Presidente de Estados Unidos entre 1977 y 1981 y el único, a mi juicio, con suficiente serenidad y valor para abordar el tema de las relaciones de su país con Cuba.

Carter hizo lo que pudo para reducir las tensiones internacionales y promover la creación de las oficinas de intereses de Cuba y Estados Unidos. Su administración fue la única que dio algunos pasos para atenuar el criminal bloqueo impuesto a nuestro pueblo.

Las circunstancias no eran ciertamente propicias en nuestro complejo mundo. La existencia de un país verdaderamente libre y soberano en nuestro hemisferio no se conciliaba con las ideas de la extrema derecha fascista de Estados Unidos, que se las arregló para hacer fracasar los propósitos del Presidente Carter, que lo hicieron acreedor del Premio Nobel de la Paz. Nadie se lo obsequió gratuitamente.

La Revolución apreció siempre su gesto valiente. En el año 2002 lo recibió calurosamente. Ahora le reiteró su respeto y aprecio.

¿Podrá realmente la oligarquía que gobierna esa superpotencia renunciar a su afán insaciable de imponer su voluntad al resto del mundo? ¿Podrá hacer honor a ese propósito un sistema que genera con creciente frecuencia presidentes como Nixon, Reagan y W. Bush, cada vez con mayor poder destructivo y menos respeto por la soberanía de los pueblos?

La complejidad del mundo actual, no deja mucho margen a recuerdos que son relativamente recientes. La despedida de Carter, hoy miércoles, coincidió con noticias preocupantes del accidente nuclear desatado por el sismo y el tsunami de Japón, que continúan llegando y no pueden ni deben ser ignoradas, no solo por su importancia, sino también por la repercusión práctica y casi inmediata que se deriva de ellas para la economía mundial.

Hoy la agencia noticiosa AP informa desde Japón que:

“La crisis en la planta nuclear japonesa dañada por el tsunami se agravó el miércoles, luego que el agua de mar cercana mostró los niveles de radiación más elevados hasta el momento.”

“En Fukushima, la radiación filtrada ha penetrado en la tierra y el mar y se ha introducido en verduras, leche no pasteurizada e incluso el agua corriente hasta en Tokio, 220 kilómetros al sur.”

“En tanto, el emperador Akihito y la emperatriz Michiko visitaron durante una hora a un grupo de evacuados en Tokio.”

Reuters, por su parte, comunica desde Tokio que:

“Japón actualizó el miércoles sus estándares para planta de energía nuclear, el primer reconocimiento oficial de que sus normas eran insuficientes cuando un terremoto dañó una de sus instalaciones, desencadenando la peor crisis atómica desde Chernóbil en 1986.”

“El anuncio fue dado a conocer luego de que el Gobierno reconoció que no hay un final a la vista para la crisis y de que un salto en los niveles de yodo radiactivo en el agua de mar se sumaron a la evidencia de filtraciones en los reactores en torno al complejo y más allá.”

“Hallazgos de plutonio en el suelo de la planta elevaron la alarma pública sobre el accidente, que ha eclipsado el desastre humanitario ocasionado por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo, que dejaron 27.500 muertos o desaparecidos.”

“Antes del desastre, los 55 reactores nucleares de Japón proveían cerca del 30 por ciento de la energía eléctrica del país. Se esperaba que el porcentaje subiera a un 50 por ciento para el 2030, entre los mayores del mundo.”

“Nuevas lecturas mostraron un salto en el yodo radiactivo a 3.355 veces el límite legal, indicó la agencia estatal de seguridad nuclear, aunque el organismo minimizó su impacto, diciendo que las personas habían abandonado el área y que se había detenido la actividad de pesca.”

“Cientos de ingenieros han luchado durante casi tres semanas por enfriar los reactores de la planta y evitar una catastrófica fusión de barras de energía, aunque la situación parece haber dejado atrás ese escenario de pesadilla.”

“Jesper Koll, director de investigación de valores de JPMorgan Securities en Tokio, dijo que una dilatada batalla para controlar la planta y frenar las fugas de radiactividad perpetuaría la incertidumbre y actuaría como un lastre para la economía.”

“‘El peor escenario posible es que ésto se alargue no por uno, dos o seis meses, sino por dos años, o indefinidamente’, declaró.”

“Un subproducto de reacciones atómicas que puede ser usado en bombas nucleares, el plutonio es altamente carcinógeno y una de las sustancias más peligrosas del planeta, indicaron expertos.”

Una tercera agencia, la DPA, desde Tokio señala que:

“Los técnicos japoneses siguen sin poder frenar la crisis nuclear casi tres semanas después de los accidentes en la planta atómica de Fukushima. El gobierno de Tokio empieza por ello a estudiar medidas extraordinarias para detener la emisión de radiactividad de las instalaciones.”

“La idea es cubrir los reactores con una especie de tejido. Las recientes altas mediciones de yodo 131 en el mar son un indicio de una creciente radiación. La organización ecologista Greenpeace advierte además de serios peligros para la salud de los habitantes tras mediciones propias.”

“Expertos consideran que el proceso para descartar definitivamente una posible fusión de núcleo puede tardar meses. Tepco ha prometido mejorar las condiciones laborales de los técnicos, cada vez más nerviosos y agotados.”

Mientras estos sucesos tienen lugar en Japón, el Presidente Bolivariano de Venezuela visita Argentina, Uruguay y se dirige a Bolivia, promoviendo acuerdos económicos y estrechando lazos con países de nuestro hemisferio decididos a ser independientes.

En la Universidad de La Plata, donde la tiranía promovida por Estados Unidos hizo desaparecer, entre muchos miles de argentinos, a más de 700 estudiantes ─de ellos 40 de la Escuela de Periodismo─, Chávez recibió el premio Rodolfo Walsh, en honor a uno de los heroicos periodistas revolucionarios asesinados.

Ya no solo es Cuba; son muchos los pueblos dispuestos a luchar hasta la muerte por su Patria.

Fidel Castro Ruz

Marzo 30 de 2011

J: Stigliz critica la propuesta de recortes.







Rebelion. Según Stiglitz, el plan para bajar el déficit de Estados Unidos es un pacto casi suicida















Portada ::
Economía






Aumentar tamaño del texto
Disminuir tamaño del texto
Partir el texto en columnas
Ver como pdf
31-03-2011







Según Stiglitz, el plan para bajar el déficit de Estados Unidos es un pacto casi suicida










El ganador del premio Nobel de Economía 2001, Joseph Stiglitz, criticó fuertemente la propuesta Bowles-Simpson para reducir el déficit presupuestario de Estados Unidos, al indicar que el plan haría más lento el crecimiento económico y debilitaría más la economía estadunidense.

De ser aprobado, el plan sería contraproducente y constituiría un pacto casi suicida, afirmó Stiglitz, quien planteó aumentar la base de recaudación fiscal entre la población de mayor ingreso económico, en un artículo de opinión publicado en Politico y citado por CNNExpansión en su portal de Internet.

El plan esbozado por la Comisión de Deuda del gobierno de Barack Obama, dirigida por Erskine Bowles y Alan Simpson, plantea recortar el gasto discrecional doméstico y el gasto en defensa, finalizaría con la mayoría de las exenciones fiscales, disminuiría las tasas y reduciría el gasto en salud. Propone elevar la edad de jubilación, los impuestos y el gravamen a la gasolina.

Gravar a los más ricos, plantea

Stiglitz afirmó: La reducción del déficit es importante, pero constituye un medio para un fin, no un fin en sí mismo. En contraste, impulsaría las inversiones en proyectos del sector público como forma de promover el crecimiento y reducir el déficit, indicó.

“Años de inversiones insuficientes en el sector público –en infraestructura, educación y tecnología– significan que hay amplias oportunidades de obtener altos rendimientos”, dijo.

Reformar el sistema fiscal sería una manera equitativa de incrementar los ingresos y reducir el déficit presupuestario, apuntó.

Dado que una cuarta parte de todo el ingreso generado en Estados Unidos va a parar al uno por ciento de la población, la más rica, y que la clase media estadunidense enfrenta menores ingresos que hace una década, sólo hay una manera de recaudar más impuestos: gravar a los más ricos, propone.

Las autoridades no deberían eliminar las exenciones tributarias que recibe la clase media para vivienda y salud, apuntó Stiglitz. Aunque se haga de forma gradual, el mercado inmobiliario sufriría, lo que sólo serviría para exacerbar el malestar del sector.

Además, el gobierno debería gastar menos en programas militares obsoletos, algo que la propuesta Bowles-Simpson defiende. Pero Stiglitz pide aún más reducciones. “La guerra fría terminó hace más de dos décadas, pero continuamos gastando miles de millones de dólares en armas que no funcionan contra enemigos que no existen”.







Envía esta noticia

Compartir esta noticia:
delicious 
digg 
meneame
twitter













miércoles, 30 de marzo de 2011

martes, 29 de marzo de 2011

lunes, 28 de marzo de 2011

P. Kruman, sobre la política de austeridad.







Rebelion. La falsa ilusión de la austeridad















Portada ::
Economía






Aumentar tamaño del texto
Disminuir tamaño del texto
Partir el texto en columnas
Ver como pdf
28-03-2011







La falsa ilusión de la austeridad




El País






El Gobierno de Portugal acaba de caer por una disputa respecto a las propuestas de austeridad. La rentabilidad de los bonos irlandeses ha superado el 10% por primera vez. Y el Gobierno británico acaba de rectificar a la baja su previsión económica y al alza su previsión de déficit.

¿Qué tienen en común estos acontecimientos? Todos ellos son pruebas de que reducir drásticamente el gasto cuando uno se enfrenta a un paro elevado es un error. Los defensores de la austeridad predecían que los recortes del gasto reportarían rápidamente dividendos en forma de aumento de la confianza y que habría pocos efectos adversos, o ninguno, para el crecimiento y el empleo; pero se equivocaban.

Por eso es una pena que ahora mismo, en Washington, a uno no se le considere serio a menos que profese lealtad a la misma doctrina que está fracasando tan estrepitosamente en Europa.

No siempre ha sido así. Hace dos años, ante el repunte del paro y de los grandes déficits presupuestarios -ambos consecuencia de una grave crisis financiera-, los dirigentes de los países más avanzados parecían comprender que los problemas debían abordarse por orden, centrándose primero en la creación de empleo combinada con una estrategia a largo plazo de reducción del déficit.

¿Por qué no reducir los déficits inmediatamente? Porque las subidas de impuestos y los recortes del gasto gubernamental deprimirían más las economías, con lo que empeoraría el problema del paro. Y recortar el gasto en una economía profundamente deprimida es contraproducente en gran medida, incluso desde un punto de vista puramente fiscal: cualquier ahorro que aparentemente se consiga se ve contrarrestado en parte por el descenso de los ingresos, a medida que la economía retrocede.

Así que dedicarse ahora al empleo y luego a los déficits era y es la estrategia acertada. Desgraciadamente, es una estrategia que se ha abandonado por culpa de unos riesgos imaginarios y unas esperanzas ilusorias. Por un lado, no paran de decirnos que si no reducimos drástica e inmediatamente el gasto, terminaremos como Grecia, incapaz de adquirir préstamos como no sea a unos tipos de interés desorbitados. Por otro, nos dicen que no nos preocupemos por el impacto de los recortes del gasto sobre el empleo porque la austeridad fiscal creará de hecho puestos de trabajo al aumentar la confianza.

¿Cómo ha funcionado esa historia hasta el momento? Los autodenominados halcones del déficit han estado gritando “que viene el lobo” en relación con los tipos de interés de EE UU más o menos ininterrumpidamente desde que la crisis financiera empezó a remitir, y han interpretado cada pequeña subida de los tipos como un indicio de que los mercados estaban volviéndose contra EE UU. Pero la verdad es que los tipos no han fluctuado a causa de los temores sobre la deuda, sino por la mayor o menor esperanza en la recuperación económica. Y con la plena recuperación al parecer muy lejana todavía, los tipos están ahora más bajos que hace dos años.

¿Pero, aun así, no podría EE UU terminar como Grecia? Sí, claro que sí. Si los inversores deciden que somos una república bananera cuyos políticos no pueden o no quieren luchar contra los problemas a largo plazo, desde luego que dejarán de comprar nuestra deuda. Pero esa no es una perspectiva que dependa, de un modo u otro, de si nos castigamos a nosotros mismos con recortes del gasto a corto plazo.

Si no, que les pregunten a los irlandeses, cuyo Gobierno -tras haber asumido la carga insostenible de la deuda al tratar de rescatar a unos bancos fuera de control- intentó tranquilizar a los mercados imponiendo unas medidas de austeridad absolutamente radicales a los ciudadanos corrientes. Los mismos que instaban a realizar recortes del gasto en EE UU aplaudieron. “Irlanda nos brinda una lección admirable sobre responsabilidad fiscal”, declaraba Alan Reynolds, del Instituto Cato, quien afirmaba que los recortes del gasto habían disipado los temores sobre la solvencia irlandesa y predecía una rápida recuperación económica.

Eso fue en junio de 2009. Desde entonces, el tipo de interés de la deuda irlandesa se ha duplicado; la tasa de paro de Irlanda se sitúa ahora en el 13,5%.

Y luego está la experiencia británica. Como sucede con EE UU, los mercados financieros todavía consideran que Reino Unido es solvente, lo que le da cierto margen para seguir la estrategia de dedicarse primero al empleo y luego a los déficits. Pero el Gobierno de David Cameron ha optado en cambio por pasarse a la austeridad inmediata y voluntaria, en la creencia de que el gasto privado compensará de sobra la retirada del Gobierno. El plan de Cameron se basaba en la creencia de que el hada de la confianza lo arreglaría todo.

Pero no lo ha hecho: el crecimiento británico se ha estancado y el Gobierno ha revisado al alza sus previsiones de déficit como consecuencia de ello.

Lo que me lleva de nuevo a lo que pasa por ser un debate presupuestario en Washington estos días. Un plan fiscal serio para EE UU tendría en cuenta las causas a largo plazo del gasto, sobre todo los costes sanitarios, y casi con seguridad incluiría algún tipo de subida de impuestos. Pero no somos serios: la mera mención de usar los fondos de Medicare de manera eficaz se topa con gritos sobre “listas de la muerte”, y la postura oficial del Partido Republicano -apenas cuestionada por los demócratas- parece ser la de que nadie debería pagar jamás impuestos más altos. En vez de eso, solamente se habla de recortes del gasto a corto plazo.

En resumen, tenemos un clima político en el que los autodenominados halcones del déficit quieren castigar a los parados al tiempo que se oponen a cualquier medida que aborde nuestros problemas presupuestarios a largo plazo. Y esto es lo que sabemos de la experiencia extranjera: el hada de la confianza no nos salvará de las consecuencias de nuestra locura.

Paul Krugman es profesor de Economía en Princeton y premio Nobel 2008.

http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=4041






Envía esta noticia

Compartir esta noticia:
delicious 
digg 
meneame
twitter













Escenas de la guerra humanitaria.

Las guerras humanitarias, puerta a la guerra de todos contra todos.







Rebelion. Libia frente al imperialismo humanitario












Entrevista a Jean Bricmont, físico y filósofo belga, miembro del Tribunal de Bruselas

Libia frente al imperialismo humanitario




investig'Action



Kosovo, Irak, Afganistán: los partidarios de una intervención en Libia ¿no han aprendido la lección? Jean Bricmont, autor de una obra sobre el imperialismo humanitario, nos explica porqué el derecho de injerencia es incompatible con la paz en el mundo y perjudica a las causas humanitarias. A menos, evidentemente, que dichas causa no sean más que pretextos…




¿Puede recordarnos en qué consiste el imperialismo humanitario?

Es una ideología que pretende legitimar la injerencia militar contra países soberanos en nombre de la democracia y de los derechos del Hombre. La motivación siempre es la misma: una población es víctima de un dictador y por lo tanto hay que actuar. Entonces nos sacan las referencias a la Segunda Guerra mundial, a la guerra de España y otras. Se trata de hacer aceptable la intervención. Es lo que pasó en Kosovo, Irak o Afganistán.

Y ahora ¿es el turno de Libia?

Hay una diferencia, porque en este caso está autorizada por una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Pero esa resolución ha sido votada en contra de los principios mismos de la Carta de las Naciones Unidas. Efectivamente, no veo ninguna amenaza exterior en el conflicto libio. Se ha recurrido a la noción de la “responsabilidad de proteger” a la población, pero quemando un poco las etapas. Además, no hay pruebas de que Gadafi masacre a la población simplemente con el objetivo de masacrarla. Es algo más complicado: se trata más bien de una insurrección armada y no sé de ningún gobierno que no reprima este tipo de insurrección. Evidentemente, hay daños colaterales y muertos entre los civiles. Pero si los Estados Unidos saben cómo evitar tales daños, que vayan a explicarlo a los israelíes y que se lo apliquen a sí mismos en Irak y en Afganistán. Tampoco hay ninguna duda de que los bombardeos de la coalición también van a provocar pérdidas civiles. Por lo tanto, pienso que desde un punto de vista estrictamente legal, la resolución del Consejo de Seguridad es discutible. En realidad, es el resultado de años de presión para el reconocimiento del derecho de injerencia que en este caso se legitima.

Sin embargo, incluso entre las izquierdas mucha gente piensa que había que intervenir en Libia para detener la masacre. ¿Cree que es un error de juicio?

Sí, y por varias razones. En primer lugar, esta campaña establece el reino de la arbitrariedad. En efecto, el conflicto libio no tiene nada de excepcional. Hay muchos otros en el mundo, ya sea en Gaza, Bahrein o, hace algunos años, en el Congo. En este último caso estábamos ante el cuadro de una agresión exterior por parte de Rwanda y de Burundi. La aplicación del derecho internacional habría permitido salvar millones de vidas pero no se hizo. ¿Por qué? Además, si se aplican los principios de injerencia que subyacen en el ataque contra Libia, esto significa que todo e mundo puede intervenir en todas partes. Imaginemos que los rusos intervinieran en Bahrein o los chinos en Yemen: sería la guerra generalizada y permanente. Una gran característica del derecho de ingerencia es, en consecuencia, el no respetar el derecho internacional clásico. Y si hubiera que modificar el derecho internacional con nuevas reglas que legitimaran el derecho de ingerencia, ello desembocaría en la guerra de todos contra todos. Es un argumento al que los partidarios del derecho de ingerencia nunca responden. Finalmente, estas ingerencias refuerzan lo que yo llamo el “efecto barricada”: todos los países que están en el punto de mira de los Estados Unidos van a sentirse amenazados y van a intentar reforzar su armamento. Hemos visto lo que pasó con Saddam. Por cierto, Gadafi declaró a la liga árabe: “Acaban de ahorcar a un miembro de esta liga y no habéis dicho nada. Pero lo mismo puede ocurriros a vosotros, ya que, aunque todos vosotros seáis aliados de los Estados Unidos, Saddam también lo fue anteriormente”. Actualmente se reproduce lo mismo con Gadafi y la amenaza que pende sobre muchos Estados puede relanzar la carrera armamentística. Rusia, que no es precisamente un país desarmado, ya ha anunciado que iba a reforzar sus tropas. Pero esto puede ir incluso más lejos: si Libia tuviera armamento nuclear jamás habría sido atacada. Desde luego, esta es la razón por la que no se ataca a Corea del Norte. La izquierda que apoya la intervención en Libia debería pues darse cuenta de que la consecuencia de la ingerencia humanitaria es el relanzamiento de la carrera armamentística y a largo plazo, la creación de lógicas de guerra.

Sin embargo, esta intervención militar contra Gadafi ¿no podría considerarse un mal menor?

Hay que pensar en las consecuencias. Ahora que las fuerzas occidentales están comprometidas es evidente que tendrán que llegar hasta el fin, derrocar a Gadafi e instalar a los rebeldes en el poder. ¿Qué va a pasar entonces? Libia parece dividida. Si hay resistencia en Trípoli ¿Occidente va a ocupar el país y embarcarse en una guerra sin fin como en Irak o Afganistán? Pero, imaginemos que todo va bien: la coalición se deshace de Gadafi en unos cuantos días, los rebeldes toman el poder y el pueblo libio está unido. Todo l mundo está contento ¿y después? No creo que Occidente vaya a decir: “Ya está, hemos hecho esto porque somos buenos y respetamos los derechos del Hombre. Ahora podéis hacer lo que queráis”. ¿Qué pasará si el nuevo gobierno libio parece demasiado musulmán o no limita correctamente los flujos migratorios? ¿Creéis que se les va a dejar actuar? Es evidente que después de esta intervención el nuevo gobierno libio será prisionero de los intereses occidentales.

Si la intervención militar no es la solución, entonces ¿qué hacer?

En primer lugar habrían debido ensayarse honestamente todas las soluciones pacíficas. Quizás no habría funcionado, pero respecto ha habido una voluntad manifiesta de rechazar estas soluciones. Es desde luego una constante en las guerras humanitarias. Por lo que respecta a Kosovo habían propuestas serbias muy detalladas para llegar a una solución pacífica pero fueron rechazadas. Occidente incluso impuso condiciones que hacían imposible cualquier negociación, como la ocupación de Serbia por tropas de la OTAN. En Afganistán, los talibanes propusieron hacer juzgar a Ben Laden por un tribunal internacional si se les aportaban pruebas de su implicación en el atentado del World Trade Center. Estados Unidos lo rechazaron y bombardearon. En Irak, Saddam había aceptado el retorno de los inspectores de la ONU así como numerosas condiciones enormemente apremiantes. Pero nunca era suficiente. En Libia, Gadafi había aceptado un cese el fuego y había propuesto el envío de observadores internacionales. Los observadores no fueron enviados y se ha dicho que Gadafi no había aceptado el cese el fuego. Occidente también rechazó la propuesta de mediación de Chávez, que sin embargo fue aprobada por numerosos países latinos así como por la Organización para la Unidad Africana. Respecto a esto me enfurezco cuando oigo a gente de izquierda, en Europa, denunciar la horrible Alianza Bolivariana que sostiene al dictador Gadafi. ¡Esta gente no ha comprendido nada! Los dirigentes latinos son personas en el poder con importantes responsabilidades. No son izquierdistas insignificantes que parlotean en su rincón. Y el gran problema de estos dirigentes es la ingerencia de los Estados Unidos; cuanto menos puedan los Estados Unidos hacer lo que quieran en cualquier parte del mundo, mejor será para todos los países que intentan emanciparse de su tutela y para todo el mundo.

El hecho de rechazar sistemáticamente las soluciones pacíficas ¿significa que la ingerencia humanitaria es un pretexto?

Sí, pero funciona con respecto a los intelectuales, tengo más dudas con respecto a la reacción de los pueblos europeos. ¿Van a apoyar a sus dirigentes en el ataque contra Gadafi? A nivel de los pueblos son las guerras por la seguridad las que gozan de una mayor legitimidad; cuando hay, por ejemplo, una amenaza contra nuestras poblaciones, nuestras formas de vida, etc. Pero aquí y en Francia, con todo este clima islamofóbico que hay (que no apruebo, pero que existe) ve a explicarles que vamos a luchar en Cirenaica por unos insurgentes a los que vemos gritando “« Allah U Akbar »&hellip ¡es contradictorio! A nivel político la mayoría de partidos apoyan la intervención. Incluso en la izquierda, trotskistas como Mélenchon. Todos andan con la flor en el fusil. Los más moderados apoyaban únicamente una zona de exclusión aérea, pero si Gadafi envía sus tanques hacia Benghazi ¿qué hacemos? Durante la Segunda Guerra mundial los alemanes perdieron muy rápidamente l control aéreo, pero resistieron todavía varios años. Sin lugar a dudas los moderados debían pensar que, en la medida en que el objetivo es el derrocamiento de Gadafi, se iría más allá del establecimiento de una zona de exclusión aérea. La izquierda, incapaz de apoyar verdaderas soluciones alternativas, está atrapada por la lógica de la ingerencia humanitaria y se ve obligada a apoyar a Sarkozy. Si la guerra se termina rápido y bien, el presidente francés se encontrará en buena posición para 2012 y la izquierda le habrá allanado el camino. Puesto que esta izquierda no asume un discurso coherente opuesto a las guerras, se ve obligada a ir a remolque de la política de ingerencia.

¿Y si la guerra va mal?

Es penoso, pero el único partido francés que se ha opuesto a la intervención en Libia es el Frente Nacional. Ha invocado especialmente la amenaza de los flujos migratorios y lo ha aprovechado para desmarcarse de la UMP y del PS diciendo que el nunca había colaborado con Gadafi. Si la guerra en Libia no funciona como está previsto ello podría beneficiar al Frente Nacional en 2012.

Si la injerencia humanitaria no es más que un pretexto ¿cual es el objetivo de esta guerra?

Las revoluciones árabes han sorprendido a los occidentales que no estaban suficientemente bien informados de lo que ocurría en el Magreb y en Oriente Medio. No pongo en entredicho que haya buenos especialistas de la cuestión, pero con frecuencia no son suficientemente escuchados a un cierto nivel de poder y desde luego se quejan de ello. Ahora pues, puede que los nuevos gobiernos egipcio y tunecino no se alineen con los intereses occidentales y, por consiguiente, podrían ser hostiles a Israel. Para asegurarse el control de la región y proteger a Tel-Aviv, los occidentales probablemente quieran deshacerse de los gobiernos ya hostiles a Israel y a los occidentales. Los tres principales son Irán, Siria y Libia. Puesto que este último es el más débil se le ataca.

¿Puede funcionar eso?

Occidente soñaba con dominar el mundo, pero desde 2003, con el fiasco irakí, se ve que no es capaz de ello. Antes, los Estados Unidos podían permitirse derrocar dirigentes que ellos mismos habían llevado al poder, como Ngô Dinh Diêm en Vietnam del Sur en los años 60. Pero Washington ya no tiene la posibilidad de hacer esto hoy en día. En Kosovo, Estados Unidos deben arreglárselas con un régimen mafioso. En Afganistán todo el mundo dice que Karzaï es un corrupto pero no tienen alternativa. En Irak también deben acomodarse con un gobierno que está lejos de convenirles totalmente. De bien seguro que el problema también se presentará en Libia. Un irakí me dijo una vez: “En esta parte del mundo no hay liberales en el sentido occidental del término, excepto algunos intelectuales bastante aislados”. Como Occidente no puede apoyarse en dirigentes que compartan sus ideas y defiendan totalmente sus intereses, intenta imponer dictaduras por la fuerza. Pero evidentemente esto crea un desfase con las aspiraciones de la base popular. Además, este procedimiento resulta un fracaso y la gente no debería engañarse acerca de lo que pasa. Occidente, que creía poder controlar al mundo árabe con marionetas como Ben Alí y Mubarak, se diría de pronto: “Todo era falso ¿vamos ahora a apoyar la democracia en Túnez, en Egipto y en Libia? “ Es tanto más absurdo teniendo en cuenta que una de las grandes reivindicaciones de las revoluciones árabes es el derecho a la soberanía. Dicho de otra forma ¡no a la injerencia! Occidente debe resignarse: el mundo árabe, lo mismo que África y el Caribe, no le pertenece. De hecho, las regiones donde Occidente interviene más son las menos desarrolladas. Si se respeta su soberanía estas regiones podrán desarrollarse, como lo ha hecho Asia y como sin duda lo hará América latina. La política de injerencia es un fracaso para todo el mundo.

¿Cuál es la alternativa entonces?

En primer lugar hay que saber que la política de injerencia necesita un presupuesto militar importante. Sin el apoyo de Estados Unidos y su presupuesto militar delirante, Francia y Gran Bretaña no se habrían comprometido. Bélgica, todavía menos. Pero todos estos medios puestos a disposición no caen del cielo. Este presupuesto se basa en préstamos de la China que conllevan déficits US y todo tipo de problemas económicos. Raramente se piensa en ello. Además, se nos repite constantemente que no hay dinero para la educación, la investigación, las pensiones, etc. ¡Y de repente aparece una gran cantidad de dinero para hacer la guerra en Libia. Una cantidad ilimitada, puesto que no se sabe cuanto tiempo va a durar esta guerra! Por otra parte ya se está gastando dinero para nada en Afganistán. Hace falta, por lo tanto, otra visión política y, a mi parecer, suiza es un buen ejemplo. Este país consagra su presupuesto militar únicamente a la protección de su territorio. Los suizos tiene una política de no intervención coherente, puesto que su ejército, por principio no puede salir de su territorio. Podría decirse que Suiza deja que Gadafi masacre a los insurgentes pero, en primer lugar, ella nunca ha cometido un genocidio u otras masacres, incluso si su política puede ser criticada a otros niveles (banca o inmigración). Y, en segundo lugar, si todo el mundo hiciera como Suiza, por las razones que ya he explicado anteriormente, el mundo iría mucho mejor. Las guerras y los embargos siempre tienen consecuencias desastrosas. A mi parecer, la mejor alternativa es la cooperación con distintos países, sean cuales sean sus regímenes. A través del comercio, pero no el de armas evidentemente, las ideas circulan y las cosas pueden evolucionar, sin guerra. Se pueden discutir las modalidades: comercio justo, ecológico, etc. Pero el comercio es una alternativa mucho menos sangrienta que las sanciones y los embargos, que son la versión soft de las guerras humanitarias.

Jean Bricmont es profesor de física en la Universidad de Louvain la Neuve, Bélgica. Es miembro del Tribunal de Bruselas. Su último libro, Humanitarian Imperialism acaba de publicarse en Monthly Review Press (hay traducción castellana en Editorial Viejo Topo, Barcelona, 2009). Es sobre todo conocido en el mundo hispano por su libro –coescrito con el físico norteamericano Alan Sokal— Imposturas intelectuales (Paidós, 1999), un brillante y demoledor alegato contra la sedicente izquierda académica relativista francesa y norteamericana en boga en los últimos lustros del siglo pasado.

Traducido para www.sinpermiso.info por Anna Maria Garriga Tarré

Fuente: http://www.michelcollon.info/La-Libye-face-a-l-imperialisme.html?lang=fr







Envía esta noticia

Compartir esta noticia:
delicious 
digg 
meneame
twitter













domingo, 27 de marzo de 2011

Guerra humanitaria con uranio empobrecido.







Rebelion. Uranio empobrecido: Una extraña forma de proteger a los civiles libios













Uranio empobrecido: Una extraña forma de proteger a los civiles libios




Stop the War Coalition



Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández




“Los misiles que llevan puntas dotadas de uranio empobrecido se ajustan a la perfección a la descripción de bomba sucia… Yo diría que es el arma perfecta para asesinar a montones de gente.” Marion Falk, experta en física química (jubilada), Laboratorio Lawrence Livermore, California, EEUU.

En las primeras veinticuatro horas del ataque contra Libia, los B-2 de EEUU arrojaron 45 bombas de 2.000 libras de peso cada una [algo menos de 1.000 kilos]. Estas enormes bombas, junto con los misiles Cruise lanzados desde aviones y barcos británicos y franceses, contenían ojivas de uranio empobrecido.

El UE es el producto de desecho del proceso de enriquecimiento de uranio. Se utiliza en las armas y reactores nucleares. Debido a que es una sustancia muy pesada, 1,7 veces más densa que el plomo, es muy valorada en el ejército por su capacidad para atravesar vehículos blindados y edificios. Cuando un arma que lleva una punta de uranio empobrecido golpea un objeto sólido, como una parte de un tanque, penetra a través de él y después explota formando una nube candente de vapor. El vapor se asienta como polvo, un polvo que no sólo es venenoso, también radioactivo.

Un misil con uranio empobrecido cuando impacta se quema a 10.000ºC. Cuando alcanza un objetivo, el 30% se fragmenta en metralla. El 70% restante se evapora en tres óxidos altamente tóxicos, incluido el óxido de uranio. Este polvo negro permanece suspendido en el aire, y dependiendo del viento y de la climatología, puede viajar sobre grandes distancias. Si Vds. piensan que Iraq y Libia están muy lejos, recuerden que la radiación de Chernobyl llegó hasta Gales.

Resulta muy fácil inhalar partículas de menos de 5 micras de diámetro, que pueden permanecer en los pulmones o en otros órganos durante años. Ese uranio empobrecido inhalado puede causar daños renales, cánceres de pulmón y huesos, trastornos en la piel, trastornos neurocognitivos, daños cromosómicos, síndromes de inmunodeficiencia y extrañas enfermedades renales e intestinales. Las mujeres embarazadas que se ven expuestas al uranio empobrecido pueden dar a luz a bebés con defectos géticos. Una vez que el polvo se vaporiza, no cabe esperar que el problema pueda desaparecer pronto. Como emisor de partículas alfa, el UE tiene una vida media de 4.500 millones de años.

En el ataque de la operación “conmoción y pavor” contra Iraq, se arrojaron, sólo sobre Bagdad, 1.500 bombas y misiles. Seymour Hersh ha afirmado que sólo la Tercera Insignia de Aviación de los Marines de EEUU arrojó más de “quinientas mil toneladas de munición”. Y todo eso llevaba puntas de uranio empobrecido.

Al Yasira informó que las fuerzas invasoras estadounidenses dispararon 200 toneladas de material radioactivo contra edificios, hogares, calles y jardines de Bagdad. Un periodista del Christian Science Monitor llevó un contador Geiger hasta zonas de la ciudad que habían sufrido una dura lluvia de artillería de las tropas estadounidenses. Encontró niveles de radiación de entre 1.000 a 1.900 veces por encima de lo normal en zonas residenciales. Con una población de 26 millones de habitantes, eso significa que EEUU arrojó una bomba de una tonelada por cada 52 ciudadanos iraquíes, es decir, unos 20 kilos de explosivo por persona.

William Hague [Secretario de Estado de Asuntos Exteriores británico] dijo que íbamos a Libia “a proteger a los civiles y a las zonas habitadas por civiles”. Vds. no tienen que mirar muy lejos para ver a quién y qué se está “protegiendo”.

En las primeras 24 horas, los “Aliados gastaron” 100 millones de libras esterlinas en munición dotada de punta de uranio empobrecido. Un informe sobre control de armamento realizado en la Unión Europea afirmaba que sus estados miembros concedieron en 2009 licencias para la venta de armas y sistemas de armamento a Libia por valor de 333.657 millones de euros. Gran Bretaña concedió licencias a las firmas de armamento para la venta de armas a Libia por valor de 24.700 millones de euros y el Coronel Gadafi pagó también para que se enviara a las SAS [siglas en inglés de Servicio Especial Aéreo] a entrenar su 32ª Brigada.

Me apuesto a que en los próximos 4.500 millones de años, William Hague no va a ir de vacaciones al Norte de África.

Fuente:

http://stopwar.org.uk/content/view/2321/27/







Envía esta noticia

Compartir esta noticia:
delicious 
digg 
meneame
twitter













sábado, 26 de marzo de 2011

Fidel comenta visita de Obama a Cetroamérica

Entre la emigración y el crimen
26 MARZO 2011 8 COMENTARIOS
Los latinoamericanos no son criminales natos ni inventaron las drogas.

Los aztecas, los mayas, y otros grupos humanos precolombinos de México y Centroamérica, por ejemplo, eran excelentes agricultores y ni siquiera conocían el cultivo de la coca.

Los quechuas y aymaras fueron capaces de producir nutritivos alimentos en perfectas terrazas que seguían las curvas de nivel de las montañas. En altiplanos que sobrepasaban a veces los tres y cuatro mil metros de altura, cultivaban la quinua, un cereal rico en proteínas, y la papa.

Conocían y cultivaban también la planta de coca, cuyas hojas masticaban desde tiempos inmemorables para mitigar el rigor de las alturas. Se trataba de una costumbre milenaria que los pueblos practican con productos como el café, el tabaco, el licor u otros.

La coca era originaria de las abruptas laderas de los Andes amazónicos. Sus pobladores la conocían desde mucho antes del Imperio Inca, cuyo territorio, en su máximo esplendor, se extendía en el espacio actual del Sur de Colombia, todo Ecuador, Perú, Bolivia, el Este de Chile, y el Noroeste de Argentina; que sumaba cerca de dos millones de kilómetros cuadrados.

El consumo de la hoja de coca se convirtió en privilegio de los emperadores Incas y de la nobleza en las ceremonias religiosas.

Al desaparecer el Imperio tras la invasión española, los nuevos amos estimularon el hábito tradicional de masticar la hoja para extender las horas de trabajo de la mano de obra indígena, un derecho que perduró hasta que la Convención Única sobre Estupefacientes de Naciones Unidas prohibió el uso de la hoja de coca, excepto con fines médicos o científicos.

Casi todos los países la firmaron. Apenas se discutía cualquier tema relacionado con la salud. El tráfico de cocaína no alcanzaba entonces su enorme magnitud actual. En los años transcurridos se han creado gravísimos problemas que exigen análisis profundos.

Sobre el espinoso tema de la relación entre la droga y el crimen organizado la propia ONU afirma delicadamente que “Latinoamérica es ineficiente en el combate al crimen.”

La información que publican distintas instituciones varía debido a que el asunto es sensible. Los datos a veces son tan complejos y variados que pueden inducir a confusión. De lo que no cabe la menor duda es que el problema se agrava aceleradamente.

Hace casi un mes y medio, el 11 de febrero de 2011 un informe publicado en la Ciudad de México por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia de ese país, ofrece interesantes datos sobre las 50 ciudades más violentas del mundo, por el número de homicidios ocurridos en el año 2010. En él se afirma que México reúne el 25% de ellas. Por tercer año consecutivo la número uno corresponde a Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos.

A continuación expone que “…ese año la tasa de homicidios dolosos de Juárez fue 35% superior a la de Kandahar, Afganistán ―la número dos en el ranking― y 941% superior a la de Bagdad…”, es decir, casi diez veces superior a la capital de Irak, ciudad que ocupa el número 50 de la lista.

Casi de inmediato añade que la ciudad de San Pedro Sula, en Honduras, ocupa el tercer lugar con 125 homicidios por cada 100 000 habitantes; siendo solo superada por Ciudad Juárez, en México, con 229; y Kandahar, Afganistán, con 169.

Tegucigalpa, Honduras, ocupa el sexto con 109 homicidios, por cada 100 000 habitantes.

De este modo se puede apreciar que Honduras, la de la base aérea yanki de Palmerola, donde se produjo un Golpe de Estado ya bajo la presidencia de Obama, tiene dos ciudades entre las seis en que se producen más homicidios en el mundo. Ciudad de Guatemala alcanza 106.

De acuerdo a dicho informe, la ciudad colombiana de Medellín, con 87.42 figura también entre las más violentas de América y el mundo.

El discurso del Presidente norteamericano Barack Obama en El Salvador, y su posterior conferencia de prensa, me condujeron al deber de publicar estas líneas sobre el tema.

En la Reflexión de marzo 21 le critiqué su falta de ética al no mencionar en Chile siquiera el nombre de Salvador Allende, un símbolo de dignidad y valentía para el mundo, quien murió como consecuencia del golpe de Estado promovido por un Presidente de Estados Unidos.

Como conocía que al día siguiente visitaría El Salvador, un país centroamericano símbolo de las luchas de los pueblos de nuestra América que más ha sufrido como consecuencia de la política de Estados Unidos en nuestro hemisferio, dije: “Allí tendrá que inventar bastante, porque en esa hermana nación centroamericana, las armas y los entrenadores que recibió de los gobiernos de su país, derramaron mucha sangre.”

Le deseaba buen viaje y “un poco más de sensatez.” Debo admitir que en su largo periplo, fue un poco más cuidadoso en el último tramo.

Monseñor Oscar Arnulfo Romero era un hombre admirado por todos los latinoamericanos, creyentes o no creyentes, así como los sacerdotes jesuitas cobardemente asesinados por los esbirros que Estados Unidos entrenó, apoyó y armó hasta los dientes. En El Salvador, el FMLN, organización militante de izquierda, libró una de las luchas más heroicas de nuestro continente.

El pueblo salvadoreño le concedió la victoria al Partido que emergió del seno de esos gloriosos combatientes, cuya historia profunda no es hora de construir todavía.

Lo que urge es enfrentar el dramático dilema que vive El Salvador, del mismo modo que México, el resto de Centroamérica y Suramérica.

El propio Obama expresó que alrededor de 2 millones de salvadoreños viven en Estados Unidos, lo cual equivale al 30% de la población de ese país. La brutal represión desatada contra los patriotas, y el saqueo sistemático de El Salvador impuesto por Estados Unidos, obligó a cientos de miles de salvadoreños a emigrar a aquel territorio.

Lo nuevo es que, a la desesperada situación de los centroamericanos, se une el fabuloso poder de las bandas terroristas, las sofisticadas armas y la demanda de drogas, originadas por el mercado de Estados Unidos.

El Presidente de El Salvador en el breve discurso que precedió al del visitante, expresó textualmente: “Le insistí que el tema del crimen organizado, la narcoactividad, la inseguridad ciudadana no es un tema que ocupe sólo a El Salvador, Guatemala, Honduras o Nicaragua y ni siquiera México o a Colombia; es un tema que nos ocupa como región, y en ese sentido estamos trabajando en la construcción de una estrategia regional, a través de la Iniciativa CARFI.”

“…le insistí, en que este es un tema que no sólo debe ser abordado desde la perspectiva de la persecución del delito, a través del fortalecimiento de nuestras policías y nuestros ejércitos, sino que también enfatizando en las políticas de prevención del delito y por lo tanto, la mejor arma para combatir en sí la delincuencia, en la región, es invirtiendo en políticas sociales.”

En su respuesta el mandatario norteamericano dijo: “El Presidente Funes se ha comprometido a crear más oportunidades económicas aquí en El Salvador para que la gente no sienta que debe enrumbarse al norte para mantener a su familia.”

“Sé que esto es especialmente importante para los aproximadamente 2 millones de salvadoreños que están viviendo y trabajando en Estados Unidos.”

“…puse al día al Presidente sobre las nuevas medidas de protección al consumidor que promulgué, que les dan a las personas más información y aseguran que sus remesas en efecto les lleguen a sus seres queridos en casa.

“Hoy, también estamos lanzando un nuevo esfuerzo para hacerles frente a los narcotraficantes y pandillas que han causado tanta violencia en todos los países, especialmente aquí en Centroamérica.”

“…dedicaremos $200 millones a apoyar los esfuerzos aquí en la región, lo que incluye hacerles frente [...] a las fuerzas sociales y económicas que impulsan a los jóvenes hacia la criminalidad. Ayudaremos a reforzar los tribunales, los grupos de la sociedad civil y las instituciones que defienden el estado de derecho.”

No necesito una palabra más para expresar la esencia de una situación dolorosamente triste.

La realidad es que muchos jóvenes centroamericanos han sido conducidos por el imperialismo a cruzar una rígida y cada vez más infranqueable frontera, o prestar servicios en las bandas millonarias de los narcotraficantes.

¿No sería más justo ―me pregunto― una Ley de Ajuste para todos los latinoamericanos, como la que se inventó para castigar a Cuba hace ya casi medio siglo? ¿Seguirá creciendo hasta el infinito el número de personas que mueren cruzando la frontera de Estados Unidos y las decenas de miles que ya están muriendo cada año en los pueblos a los que usted ofrece una “Alianza Igualitaria”?



Fidel Castro Ruz

¿ Vendrán otros Sucumbios ?







Rebelion. Correa respalda rebelión católica en Sucumbíos















Portada ::
Ecuador






Aumentar tamaño del texto
Disminuir tamaño del texto
Partir el texto en columnas
Ver como pdf
26-03-2011







Correa respalda rebelión católica en Sucumbíos




IPS



La designación de un sacerdote ultraconservador como administrador apostólico de la diócesis de Sucumbíos, en el noreste de Ecuador, puso a buena parte de los católicos de la zona en franca rebeldía, apoyados por organizaciones sociales y hasta por el propio presidente Rafael Correa.




La crisis en el seno de la colectividad católica, de gran presencia e incidencia social en esta provincia amazónica, motiva desde enero movilizaciones callejeras de detractores y partidarios de Rafael Ibarguren Schindler, uno de los líderes de los Heraldos del Evangelio, una asociación de derecho pontificio heredera de la ultraderechista Tradición Familia y Propiedad. Este sacerdote, nacido en 1952 en Argentina y ordenado sólo en 2005, asumió el 30 de octubre como encargado provisional del Vicariato Apostólico de San Miguel de Sucumbíos, en reemplazo del obispo Gonzalo López Marañón, quien tras realizar una reconocida obra social por más de 40 años en la zona debió renunciar al cumplir 75 años de edad como dictan las normas de la Iglesia.

La decisión del Vaticano agregó así un nuevo conflicto a la bullente Nueva Loja, la capital provincial que, además de ser el centro de la actividad petrolera ecuatoriana, es un punto estratégico para el tránsito de refugiados, desplazados y hasta de guerrilleros encubiertos de Colombia en razón de los escasos 18 kilómetros que la separan de la frontera con ese país.

Esta ciudad ya era foco de atención internacional por el histórico fallo del juez Nicolás Zambrano, de la Corte Provincial de Sucumbíos, que el 14 de febrero condenó a la multinacional Chevron a pagar 9.510 millones de dólares, la más alta condena a una petrolera por contaminación ambiental. Este dictamen ha sido apelado por las partes ante el pleno del tribunal.

El rechazo popular a Ibarguren Schindler llevó al presidente Correa, quien se declara católico de izquierda, a expresar que podría incluso vetar su nombramiento haciendo uso de una cláusula del Modus Vivendi, como se denomina el tratado firmado en 1934 entre Ecuador y el Vaticano y que enmarca las relaciones entre la Iglesia Católica y el Estado.

"Los meses trascurridos desde el cambio de mando demostraron que los Heraldos del Evangelio y el nuevo administrador están empeñados en acabar con todo el proceso pastoral que por 40 años se construyó en Sucumbíos", dijo a IPS Maritza López, secretaria de la asamblea del Isamis, un organismo creado por López Marañón y ahora desconocido por la nueva autoridad.

La asamblea del Isamis (Iglesia San Miguel de Sucumbíos) está conformada por 120 delegados de las Comunidades Eclesiales de Base, de agentes de las pastorales, de misioneras y misioneros, del clero diocesano, de los servicios pastorales y de organizaciones sociales de la provincia. Funciona a modo de un parlamento democrático de la comunidad católica de la región.

"El fundador de los Heraldos fue militante y secretario de la ultraderechista Tradición, Familia y Propiedad, nacida (en Brasil) para oponerse a la izquierda y defender la propiedad frente a la reforma agraria que se llevaba adelante en la década del 60 en toda América Latina", precisó Maritza López. La asamblea del Isamis resolvió en enero por 80 por ciento de los votos pedir la renuncia de Ibarguren Schindler.

Desde entonces, la polémica ha crecido en proporciones. Los miembros del Isamis, que ya estaban en vigilia desde enero, iniciaron el domingo 20 un ayuno para exigir la salida del administrador apostólico, mientras éste y otros ocho sacerdotes de su orden buscan apoyo entre quienes cuestionan los proyectos sociales impulsados por el obispo López Marañón.

"Una de las cosas que hacen es ir a dar misas campales para las empresas petroleras, y no aceptan llevar adelante el plan pastoral aprobado ni dialogar con la asamblea del Isamis", señaló a IPS Felisa de Moncayo, quien recuerda que el obispo López Marañón "era uno más, con nosotros, y sometía a la discusión los nuevas iniciativas y nombramientos".

Correa, en un acto en Quito el 9 de este mes, recordó que Ecuador es un Estado Laico, lo cual significa que es respetuoso de la libertad religiosa. Pero rechazó que "se quiera borrar de un plumazo la presencia de los Carmelitas Descalzos en Sucumbíos y entregar el vicariato a los Heraldos del Evangelio", en contra de la opinión de las Comunidades de Base.

Sus palabras fueron dichas en el acto en que condecoró a López Marañón por la destacada labor social y defensa de los derechos humanos que impulsó durante las cuatro décadas como obispo de Sucumbíos, así como su trabajo en educación, salud y otras áreas.

Los Carmelitas Descalzos, la orden de profunda vocación misionera a la que se refirió Correa y a la cual pertenece el ex obispo de Sucumbíos, está presente en la Amazonia desde hace varias décadas y ha dado a Ecuador los más destacados prelados progresistas, como Alberto Luna Tobar y Leonidas Proaño, que formaron el grupo más comprometido con los pobres del país.

El mandatario calificó de imborrable la labor misionera de López Marañón, de quien dijo es uno de esos cristianos que se dejan matar por el Evangelio. "Luchó contra las petroleras por la defensa de la vida en todas sus formas", afirmó.

"Nosotros no queremos tener confrontaciones inútiles, no queremos polemizar, peor aún con la Conferencia Episcopal, pero quiero decirles que el tratado que regula las relaciones entre el Estado Laico-Ecuatoriano y el Vaticano nos permite vetar cualquier nombramiento de obispo", afirmó.

"Nunca se ha utilizado esta capacidad, que no nos obliguen a utilizarla ahora. Si se insiste en estos fundamentalismos absurdos de llevar a nuestra Amazonia órdenes que ponen el énfasis en el rito, en los fundamentalismos morales, con trajes medievales en plena selva, tendremos que utilizar esta potestad que nos da el tratado del Modus Vivendi", amenazó.

La referencia a los "trajes medievales" se debe a que los Heraldos del Evangelio utilizan botas de montar y una sotana blanca con traje talar pardo oscuro, que lleva por el frente una cruz de Calatrava (con brazos en forma de flores de lis) mitad blanca y mitad roja, que va desde el cuello hasta los pies. Esta orden, reconocida en 2001 por el Papa, lleva adelante una disciplina militar.

El presidente de la Conferencia de Obispos de Ecuador, Antonio Arregui, respondió a estas expresiones indicando que "sería un precedente totalmente inaudito el que a estas alturas de la historia el Estado pretenda regular el nombramiento de los obispos".

Arregui, arzobispo de Guayaquil, afirmó que en el Modus Vivendi "hay un reconocimiento expreso de que el nombramiento de los obispos corresponde al Santo Padre (el Papa)".

En lo que en principio se interpretó como una medida conciliadora, el Vaticano anunció el viernes 19 que había nombrado como delegado apostólico para Sucumbíos al ecuatoriano Ángel Polibio Sánchez, obispo de Guaranda, en la zona andina, con funciones legales y para las relaciones con el gobierno.

"Nos alegra el giro que ha dado el asunto, pero queremos ver qué alcance exacto tiene este nombramiento", dijo el canciller interino, Kintto Lucas.

Su cautela tenía base pues luego se aclaró que Ibarguren Schindler no será retirado del cargo de administrador apostólico y que el nombramiento de Sánchez busca poner a un ecuatoriano como interlocutor del Ministerio de Justicia, que atiende también el tema de Cultos y que se ha negado a inscribir el nombramiento del heraldo del Evangelio.

http://ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=97841








Envía esta noticia

Compartir esta noticia:
delicious 
digg 
meneame
twitter













Libia-USA-China.







Rebelion. La Desesperación de un Imperio decadente frente al Gran Dragón Chino












Revueltas Populares en el Magreb y Medio Oriente

La Desesperación de un Imperio decadente frente al Gran Dragón Chino




CEPRID






Revoluciones reales, situación

pre-revolucionaria o la desesperación del Imperio estadounidense por no

perder el trono hegemónico frente al poder ascendente de China?




Introducción





El siglo XXI podría ser el siglo de la caída de un

imperio y el posicionamiento de una nueva fuerza hegemónica dentro del

escenario mundial. EEUU como potencia podría ver caer estrepitosamente

su influencia política y económica frente a la entrada arrolladora del

Gran Dragón Chino. Tan solo la influencia militar estadounidense podría

seguir manteniendo a flote su decaído poder político y económico, sin

perder posición estratégica de influencia en las decisiones mundiales.

Pero resulta fácil expresarlo sin tener en cuenta las defensas u

ofensivas que pueda llegar a tener un Imperio en decadencia. Debemos

hacernos la pregunta: ¿EEUU, como Imperio, está preparado para ceder su

puesto a una potencia supra-ascendente como lo es China?





Etapa Mercantilista (Siglos XVI, XVII, y XVIII):





el Imperio español cede su puesto al Imperio Francés; el Imperio francés cede su puesto al Imperio Británico;





Etapa Capitalista (Siglos XVIII, XIX, XX, XXI…?):





el Imperio Británico cede su puesto al Imperio

estadounidense; el Imperio de EEUU ¿cederá su puesto a la gran potencia

china o futuro Imperio chino?





Dado el carácter arrogante y prepotente del imperio

estadounidense, se nos hace dificultoso suponer que el simple hecho de

tratar de ceder un puesto signifique no hacer uso desesperado de las

garras imperialistas para no perder un puesto privilegiado, y menos

teniendo su gran poder de influencia militar.

A muchos de nosotros nos podría parecer increíble el hecho de que China

pueda quitarle el trono que ostenta EEUU en la actualidad. Sin embargo

no nos debería sorprender.





Que los Grandes Medios de Difusión Masiva no le den la

importancia que significa la fuerte ascensión de China en el plano

mundial o internacional, no significa que debamos cerrar los ojos a algo

que ya perfectamente podemos notar.

Desde octubre del 2010, según la Agencia Internacional de Energía, China

ha venido posicionándose como el mayor consumidor de energía, habiendo

desplazando a los EEUU. Pero no solo eso, sino el mayor productor y

consumidor de energía del mundo.





Frente a la amenaza china, la hipocresía imperialista

suele imponerse para no poder ver el verdadero significado de la

ascensión china. Hipocresía que suele mantenerse hasta cierto punto,

para llegado el momento propicio ser cambiado de vez en cuando por

ataques políticos y económicos que de alguna forma tratan de frenar

dicho poder ascendente.





La Miopía Política de la Izquierda





Es muy penoso que ciertos elementos avanzados de nuestro

bando se inclinen por fortalecer la posición del Opresor Mayor, quien

es el que determina el actuar del Opresor Menor.





Todos podríamos estar o no de acuerdo con el Opresor

Menor, pero ignorar el significado del Opresor Mayor frente al Opresor

Menor es ignorar el proceder histórico del Opresor Mayor para con los

pueblos oprimidos del mundo.

La izquierda merece tener una posición clara frente al imperialismo y no

tener una posición oportunista y complaciente, y menos hermafrodita

políticamente; no puede ni debe remar como si nada en la misma dirección

que rema el imperialismo estadounidense.





Hoy somos testigos de una “izquierda” embobada por la

Gran Orquesta Propagandística de Occidente, siendo parte en las tribunas

de los espectadores y aplaudiendo ingenuamente a cada sonata o nota que

hoy se esté desarrollando en el Magreg y Medio Oriente: Túnez,

¡¡¡Bravo!!!; Egipto, ¡¡¡Bravo!!!; Libia, ¡¡¡Bravo!!!…





Esa “izquierda” cree ingenua y estúpidamente que quien

hace parte de la Gran Orquesta son los “pueblos oprimidos”, siendo que

quienes verdaderamente hacen parte significativa es la Gran Burguesía

Occidental. El rol de los “pueblos oprimidos” dentro de la Gran Orquesta

es sumamente básico, sirviendo fundamentalmente de peones al frente de

toda la Orquesta.





En otras palabras: los “pueblos oprimidos” están

haciendo mímica. Pero esa “izquierda” cegada por la estupidez cree que

todas esas notas que son escuchadas le son propias e incluso llega a

creer que el Imperialismo Burgués busca controlar toda la Orquesta.





La miopía política ha ahogado a gran parte de sectores

de izquierda; y ciertos intelectuales de “izquierda” han llegado hasta

el extremo de tener una posición patética de súplica para que sus

“fieles” estén “por favor” en el bando de las “justas revueltas”. Pero

dejémonos de metáforas y vayamos al grano.

Si queremos comprender todo lo que está pasando con respecto a las

revueltas populares en el Magreb y Oriente Medio, primero debemos hacer

un esfuerzo de tomar cierta distancia frente a todo lo que es divulgado

por los principales Medios de Difusión Masiva Occidentales y poner a

relieve dentro de nuestros análisis siete puntos escenciales:





1.- El comportamiento histórico imperialista (principalmente el comportamiento imperialista de EEUU).





No hay que ser muy inteligente para saber reconocer los

movimientos del imperio estadounidense que ha tenido a lo largo de su

existencia. Latinoamérica está plagada de ejemplos de invasiones e

intervenciones imperialistas, guerras de “baja intensidad”, golpes de

estado promovidos por el imperio yankee, etc.

No fue ninguna “teoría conspirativa” saber de que la CIA y las garras

imperialistas estaban detrás de la “Contra” en Nicaragua allá por los

años 80 del siglo pasado; no fue ninguna “teoría conspirativa” saber que

detrás del golpe militar en Chile (1973) estaban la CIA y las garras

imperialistas; como tampoco no es ninguna “teoría conspirativa” el saber

que las garras imperialistas estaban detrás del golpe de estado

frustrado en Venezuela (2002). El imperialismo en su momento podrá negar

su implicancia una y mil veces, pero la suma de factores llegará

siempre de alguna forma a la verdad. Tan sólo hay que saber sumar y el

resultado estará a la vista.

Hoy en día la suma de elementos aportados indirectamente por los Medios

de Difusión Masiva nos llevan a concluir que en Túnez, Egipto y Libia

(los principales focos de atención que se han sucedido uno tras otro)

las garras imperialistas están muy implicadas. Obviamente con las

particularidades que corresponden en cuanto a cada caso y a la zona que

corresponda. Es muy distinto el área latinoamericana que el área del

Magreb y el Medio Oriente. En Latinoamérica la CIA y el Mossad suele

hacer de las suyas; en el Magreb y Oriente Medio a la CIA y el Mossad

deben sumarse sus similares de la Unión Europea, dada la influencia

económica que estos últimos tiene en dicha región.





Pero sumemos un poco:





Túnez: cables de Wikileaks sobre la corrupción, la falta

de libertades y problemas de derechos humanos del gobierno de Zine

el-Abidin Ben Alí; ataques cibernéticos de los “defensores” de Wikileaks

a sitios web gubernamentales, bajo el nombre de Anonymous y la

“Operación Túnez”, supuestamente respondiendo al llamado de pueblo de

Túnez para que los pudieran “liberar”.





Egipto: la visita del general Mohamed Hussein Tantawi al

Pentágono (en los medios se les señala como visita de “altos mandos

egipcios”), la misma semana que se iniciaron las protestas en Egipto; el

administrador de la página de facebook "Todos somos Jaled Said" (y bajo

la “cobertura” de Mohamed el Baradei), Wael Ghonim, responsable de

Marketing de Google en Oriente Medio y el norte de África; el

empecinamiento de los protestantes en la famosa plaza de la Liberación;

twitter y facebook como principales convocantes a las protestas, siendo

que la penetración de internet en Egipto es de 21% (los que nos habla de

una clase media como protagonistas de las protestas y no del pueblo

pobre egipcio); dos millones de protestantes en las calles de El Cairo,

principal foco de los Medios, ¿a dónde se fueron el resto de la

población de Egipto, de una población de 81 millones de habitantes

aproximadamente?





Libia: levantamiento de una bandera monárquica

(descendientes de la Monarquía derrocada por Gadafi en 1969 preparándose

para poder recuperar el trono); encuentro de asesores militares de

EEUU, Francia e Inglaterra con los rebeldes; el silenciamiento de los

Grandes Medios con respecto a las movilizaciones a favor de Gadafi,

dándole un foco despectivo a las muestras de apoyo.





2.- La antigua cultura del pueblo árabe y musulmán (muy distintas a la cultura y a los pueblos de occidente).





La región del Magreb y Medio Oriente es una zona donde

los vicios occidentales como el alcohol y las drogas no están muy

presentes como sí lo están en Occidente. En la mayoría de los países con

fuerte influencia islámica está prohibido el consumo de alcohol, ya que

la religión musulmana prohíbe su consumo. Pero en otros países (Irán,

Kuwait, Libia, Quatar, Arabia Saudita y Yemen) además del consumo, está

prohibido producir, importar y vender alcohol. El consumo y la

producción del alcohol son legales en países como Egipto, Turquía,

Líbano, Jordania y Siria, países más occidentalizados del Medio Oriente.





También debemos señalar que en algunos países del Magreb

y Medio Oriente (Libia, Egipto, Irán, Kuwait, Arabia Saudita) el

narcotráfico es penado con la muerte; a los ladrones se le aplica la

amputación de la mano. Pero en casos extremos (robo con violencia) es

penado con muerte; el adulterio es penado con latigazos, cárcel o

lapidación, dependiendo de la aplicación que se le de en cada país; el

uso del velo por parte de las mujeres es obligatorio en algunos países,

etc.





3.- La importancia geoestratégica del Magreb y Medio Oriente (donde se encuentran las mayores reservas de petróleo del mundo).





Canal de Suez (administrado por Egipto). Principal paso de petróleo hacia Europa y EEUU.





Los mayores productores de petróleo en el Magreb y pertenecientes a la OPEP: Libia y Argelia.





Los mayores productores de petróleo de Medio Oriente y

pertenecientes a la OPEP: Arabia Saudita, Irán, Irak, Kuwait, Qatar,

Emiratos Árabes Unidos.





4.- La actual penetración económica de China en el

África y Medio Oriente.

Arabia Saudita, Angola e Irán (20,5%, 15,8% y 11,3% respectivamente; y

en concreto: 41,86, 32,17 y 23,15 millones de toneladas respectivamente)

son los mayores proveedores de petróleo de China, sumando el 47,7% del

total de sus importaciones de petróleo. Otros de los mayores proveedores

de petróleo de China son: Omán y Sudán.





China se ha posicionado como el mayor exportador a los

países del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo

(CCEAG), superando a los EEUU.

Los intercambios comerciales de China con África se han incrementado

enormemente desde inicios del presente siglo. Aún así Europa sigue

aportando mucho más a la economía de China, siguiéndole por debajo EEUU.

La presencia china en el continente africano está muy acentuada. El

gigante chino necesita materias primas para poder satisfacer su apetito y

mantener el ritmo de crecimiento actual, y África es un buen lugar para

ello. Tanto así que podríamos considerar al continente africano de la

misma forma como lo ha sido América Latina para el Imperio de EEUU en

cuanto a las materias primas. La diferencia está en que China se ha

tomado muy en serio al continente Africano como también a los países del

Medio Oriente, con los que tiene fuertes relaciones comerciales

bilaterales, algo que EEUU no ha tenido el interés debido a la falta de

confianza política, principalmente con África.





Prácticamente en todo el continente africano la

presencia china se hace evidente, especialmente en el área de la

construcción. Miles de obreros chinos hoy trabajan en África

construyendo carreteras, presas, estadios, edificios públicos,

viviendas, hospitales, puentes, centrales eléctricas, etc. Y menos debe

sorprendernos de que antes de los acontecimientos en Libia, estuvieran

operando en dicho país 75 compañías chinas, 50 proyectos y 36,000

empleados chinos.





La penetración china en Irán se ha intensificado en los

últimos años, debido a que grandes multinacionales del petróleo de

EEUU, Europa y Japón se han estado retirando del país por la supuesta

“amenaza” que se le ataña a Irán. Y China, “ni tonto ni perezoso”, ha

sabido llenar ese vacío. Hoy en día los intercambios comerciales entre

China e Irán se han quintuplicado en la última década. De los 7 mil

millones de dólares de un principio se ha pasado a los 38 mil millones

actuales.





5.- Las actuales fuertes relaciones económicas del Magreb y Oriente Medio con la Unión Europea.





La Unión Europea en los últimos años se ha convertido en

uno de los principales socios comerciales del Norte de África(Magreb).

Teniendo fuerte presencia comercial en los países más convulsionados en

los últimos tiempos como Egipto, Marruecos, Túnez y Libia.





Egipto. Su principal socio comercial es Italia, con

intercambios bordeando los 4 mil millones de euros; le siguen Alemania

(2, 847 millones), Francia (1, 942 millones) y España (1, 905 millones).





Marruecos. Tradicionalmente Francia ha sido su

principal inversor; le sigue en importancia España, Emiratos Árabes

Unidos, Suiza, Gran Bretaña y Bélgica.





Túnez. Francia es su principal socio económico con 1,

249 empresas implantadas dentro del país; le siguen Italia (704

empresas), Alemania (267), Bélgica (214), Gran Bretaña (88), Países

Bajos (77), Luxemburgo (59) y España (57). Siendo el sector

manufacturero donde se concentra la mayoría de las empresas (2,294

compañías); le siguen el sector servicio (374 empresas) y el sector

turismo (158 empresas).





Libia. La Unión Europea acapara el 79% del petróleo

exportado por ese país (siendo el 32% destinado a Italia, el 14% a

Alemania, el 10% a Francia, el 9% a España y el 14% al resto de Europa);

el 22% restantes lo acaparan China con el 10%, EEUU con el 5% y otros

el 7%.





6.- Ocupación colonial occidental en Africa y Medio

Oriente (principalmente del siglo XX por parte de potencias

imperialistas como Gran Bretaña y Francia).

Francia: Siria (1916-1946); Líbano (1940-1943); Argelia (1830-1962);

Túnez (1881-1956); Marruecos (1930-1956).

Gran Bretaña: Egipto (1882-1936); Sudán (1899-1956); Palestina

(1917-1948).

Italia: Libia (1912-1951).





7.- El comportamiento histórico de los Grandes Medios de Difusión Masiva (Occidentales y pro-Occidentales).





Para alguien medianamente informado, sabe o debería

saber que los Grandes Medios de Difusión Masiva son una extensión

natural de la clase capitalista. Todo lo que de allí se desprende es voz

de la Gran Burguesía Dominante. Por tanto, sabiendo eso de partida, se

debería tener un poco más de cuidado a la hora de tomar cierta

información prestada.





Los grandes medios capitalistas no están al servicio de

nuestros pueblos, están al servicio de las clases dominantes por más que

quieran aparentar todo lo contrario, es de perogrullo decirlo. No

existe ninguna diferencia entre la “rutina cotidiana” y los “tiempos

extraordinarios”, en cuanto a la información de los Grandes Medios. El

objetivo siempre será el mismo: el control ideológico de las masas, más

que el simple objetivo de informar.





Hoy en “tiempos extraordinarios” (las revueltas

populares en el Magreb y Medio Oriente) nadie pareciera darle

importancia al papel jugado por los Grandes Medios Occidentales y

Pro-Occidentales en la opinión generada para el beneficio de la Gran

Burguesía Dominante Occidental.





Desde el comienzo de los acontecimientos

“extraordinarios” la manipulación de los medios ha estado a la orden del

día. Y cada país afectado ha presentado especiales particularidades que

no debemos obviar.





Túnez:





Túnez fue el primer país en acaparar la atención de los

medios. Primero acaparado por los medios pro-Occidentales dentro de su

región y, al ver cierto éxito en las revueltas, acaparado de lleno por

los medios Occidentales.

Si bien las protestas en Túnez se habían originado a mediados de

diciembre (2010), todo el clímax mediático comenzó a originarse en la

primera mitad de enero, profundizándose aún más al llegar las

manifestaciones a la capital de Túnez.

Según las primeras pequeñas informaciones de los Grandes Medios, las

manifestaciones o revueltas populares en Túnez se debían principalmente a

las “altas tasas de desempleo”, lo que se le habría de sumar después:

“los altos precios de los alimentos, la caída del poder adquisitivo y el

nivel de vida” para terminar sumándose: la “corrupción del régimen” y

la “falta de libertades” por haber interferido Internet o bloqueo de

cuentas de facebook.





Lo que en un principio estaba tratándose de

“manifestaciones violentas” en contra de las “altas tasas de desempleo”

desembocó con “manifestaciones populares” en contra del “presidente” y

su salida del poder (no utilizando el término de “dictador”, pero sí

recalcando los “23 años en el poder”).





El viraje que las manifestaciones tuvieron desde la

lucha contra las “altas tasas de desempleo” hasta desembocar

directamente en la salida del presidente, se debió al haber generado

cierta especulación, en los medios, con respecto a los muertos

originados por el actuar policial para frenar las revueltas violentas

(asaltos, saqueos, quema de edificios públicos, ataque a cuarteles de

policía, etc).





Los orígenes específicos de las revueltas populares en

Túnez son dadas a conocer en la primera mitad de enero. Todos los

grandes medios señalan casi de manera simbólica la auto-inmolación de

Mohammed Bouazizi (26 años) el 16 de diciembre por habérsele “impedido

vender sus frutas”, que no murió dicho día, muriendo específicamente el

05 de enero. Pero los grandes medios se encargaron en dar a entender que

con el acto de “inmolación” el joven se había muerto, lo que distaba de

ser cierto.





Pero aparte de dicho origen, los medios se han encargado

de apartar la importancia jugada acá por los cables de Wikileaks con

respecto al gobierno de Zein el-Abidine Ali, hoy ex presidente de Túnez,

dados a conocer a principios de diciembre por medio de un sitio web de

un periódico libanés. Lo curioso es que aquellos cables se dan a conocer

mucho antes de la ya conocida auto-inmolación.





Y por otra parte, los medios se han encargado de apartar

la importancia en las revueltas de aquello que se dio a conocer como

“Anonymous” y su “Operación Túnez” a principios de enero (ataques

cibernéticos a sitos web gubernamentales). Pero para muchos, el poner en

la mesa estos detalles no menores corresponde a “teorías

conspirativas”, por tanto poco serios.





“Cocinado el pavo” el 14 de enero, Obama se ha inclinado

a aplaudir el “coraje y la dignidad” del pueblo de Túnez, sumándose un

poco más tarde, como buen perro servil, la Unión Europea. Apoyos que

habríamos de ver más abiertamente desde un primer momento con Egito y

Libia.





Las revueltas populares en Túnez generaron las simpatías

en gran parte de la Izquierda, especialmente la latinoamericana, que

veía en estos sucesos un claro arranque “revolucionario”. Pero ya

sabemos cómo terminó todo: un cambio de caretas, con fuertes disputas

entre el oficialismo y la oposición para tomar posiciones claves, más el

apagón informático sobre Túnez y la conformidad de algunos analistas al

servicio del gran capital. Pero muy buena parte de la Izquierda seguía

llamando a eso “revolución”.





Y de pronto la izquierda, gracias al nuevo foco de

atención de los grandes medios, se ve aplaudiendo las manifestaciones en

el Cairo, Egipto. Adiós Túnez.





Egipto:





Las manifestaciones en Egipto comenzaron supuestamente

gracias a las “redes sociales” (twiter y facebook) el 25 de enero,

concentrándose estas en su capital El Cairo, en un país de más de 80

millones de habitantes con un 21% de penetración de Internet. Tres días

después (28 de enero) cables de Wikileas son difundidos, y en el que

“muestran que la diplomacia estadounidense ha presionado al gobierno

egipcio para que acometa reformas democráticas y elimine el estado de

emergencia”. Pura coincidencia ¿no?





Si bien al principio nadie se adjudicaba las

convocatorias formalmente, más tarde habríamos de saber algunos nombres

que al principio no estaban entre esos convocantes. Entre ellos Wael

Ghonim, un ejecutivo responsable de Marketing de Google en Oriente Medio

y el norte de África y Mohamed el Baradei, ex director general de la

Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA – 1997-2009) y

galardonado con el Premio Nobel de la Paz (2005). Este último

posicionado por los grandes medios como el “principal líder opositor”,

siendo que el principal grupo opositor era y es la Hermandad Musulmana.





La Plaza de la Liberación (Plaza Tahrir) queda como el

epicentro de las manifestaciones en contra del presidente Hosni Mubarak

que piden su salida del poder.





Los medios convierten a la plaza como el lugar

predilecto de sus operaciones y, a su vez, posicionan a las “plazas” del

mundo árabe o musulmán, como el lugar de encuentro de los manifestantes

en contra de sus “regímenes”.





Y como bien sabemos todo acabó con la salida de Mubarak

(11 de Febrero) y la entrada en escena del Consejo Supremo de las

Fuerzas Armadas al mando del general Mohamed Hussein Tantawi,

considerado el “predilecto” del Pentágono… Sí, el mismo que andaba por

Washington la misma semana de las revueltas en Egipto. Pero lo curioso

es que los medios no siguieron alentando las demandas populares que

habían tenido poco antes: la salida de cualquier residuo del régimen

anterior. En cambio, tomaron una postura conformista.





Y de pronto la izquierda, gracias al nuevo foco de

atención de los grandes medios, se ve aplaudiendo las “revueltas

populares” en Libia. Adiós Egipto.





Libia:





Aquí la Izquierda entra a un espacio donde su brújula

queda seriamente averiada, desconociendo saber dónde queda su norte. Y

los grandes medios entran de lleno a calificar a Muamar el Gadafi como

un “dictador”, después que se le había estado calificando como “líder

libio”. De pasar por “inversiones del Estado Libio” con empresas como

UniCredit, Finmeccanica o ENI, han pasado a considerarse “los negocios

del dictador Gadafi”. Y del uso del recurso propagandístico de la

“inminente derrota” (de la misma manera como han puesto en Colombia a

las FARC-EP: “las FARC-EP están acabadas”, “la FARC-EP están

acorraladas”, etc) ahora se ha pasado al recurso propagandístico de la

“compasión” ("salvemos a los pobrecitos, invadamos y salvemos al pueblo

libio").





Los grandes medios entonces se encuentran con la

sorpresa de que en Libia no existe suficiente “capital humano” para

llenar “plazas” en el centro de poder de Trípoli, como sí los hubo en El

Cairo. Por lo que pasan al uso del recurso propagandístico de la

exageración, el rumor, el montaje, complementándolo con los habituales:

el recurso propagandístico de la “satanización”, “la comunidad

internacional”, la difamación, la filtración, el consenso, etc. Sus

consentidos pasan a ser los “rebeldes” del “Consejo Nacional

Revolucionario Transitorio” o “Consejo Nacional de Transición”. Y un

“líder” de los “rebeldes”, llamado Mustafá Abdel Jalil, pasa a ser algo

así como “el primer líder” que aparece para los Grandes Medios en las

revueltas del Magreb y Medio Oriente, ya que todas estas se han

caracterizado por no poseer líderes o dirección política visible.





Y muchos dentro de la Izquierda, simpatizantes de los

“rebeldes”, les hace consuelo en un principio el que los “rebeldes” se

declaren en contra de la intervención militar extranjera. Pero poco

tiempo después razonan un poco y llegan a la conclusión de que les es

imposible derrotar a Gadafi y sus fuerzas militares. Por lo que recurren

cobardemente a las faldas imperialistas para que les puedan dar una

manito. Como si una verdadera revolución se hiciera en un par de días.

¿Estos son los “rebeldes” de esta Izquierda que ha perdido su norte?





Si estos “rebeldes” han tomado las armas entonces que

asuman esa responsabilidad con coraje, pero que no vengan a acobardarse

yendo a las faldas imperialistas. Ellos saben bien el lugar que han

escogido, pues que lo asuman con dignidad y coraje, sin acobardarse,

como todo buen guerrero.





La opción que se ha escogido, por tanto, es la vía

militar para derrocar a Gadafi, no es ningún "pueblo" que está agarrando

las armas. Y cuando existe una amenaza real dentro de cualquier Estado

la respuesta será la misma que pueda tener cualquier Estado que quiera

defender su status quo. Si esos grupúsculos, al servicio de potencias

imperialistas, escogieron la vía armada, entonces que se atengan a las

consecuencias.





Pero lo que nos incomoda más es que esa Izquierda sin

ninguna vergüenza dice apoyar a unos “rebeldes” que levantan una bandera

monárquica y que se reúne con asesores militares de países como EEUU,

Gran Bretaña y Francia. En otras palabras: esta Izquierda apoya a unos

“rebeldes” pro-monárquicos y pro-imperialistas.





Ahora que las fuerzas imperialistas están más cercanas a

intervenir militarmente para al mismo tiempo darles una manito a los

“rebeldes” ¿la postura de la Izquierda será la misma si es que se

interviene militarmente?





Sólo falta el obstáculo que representa la ONU, muy

difícil respecto al derecho a veto que poseen Rusia y China en el

Consejo de Seguridad, después de haber superado el supuesto obstáculo

que representaba la Liga Árabe que se ha posicionado sumisamente, servil

a los intereses imperialistas más que a favor del pueblo libio. Pero

todos sabemos que los EEUU junto a sus aliados imperialistas pueden

invadir a Libia sin que haga falta alguna “resolución del Concejo de

Seguridad de la ONU”. El ejemplo más claro ha sido la invasión a Irak

(2003) con Bush hijo de presidente.





La falta de rigor en los análisis de izquierda





Aquí hay que ser objetivos, meticulosos y muy rigurosos

en nuestros análisis y no tratar de sumarse al bando de los que buscan

agradar, ni menos sumarse al bando de los intelectuales o figuras de

renombre por buscar sentirse protegidos queriendo permanecer fuera del

ojo crítico, ni querer formar un coro de ideas a favor de un determinado

planteamiento, ni sumarse a un coro de odas hacia las revueltas, ni

usar el recurso retórico de traer a relieve a pensadores clásicos o no

clásicos para poder justificar sus propias posiciones, que perfectamente

las podemos traer, pero siempre dando muestras de independencia en el

pensamiento.





Si tenemos el interés de repetir las ideas ajenas,

entonces tengamos la decencia y el coraje de repetirlas con nuestras

propias palabras.





Muchas veces todo lo que creemos ver no es lo que parece

ser. Por lo que distanciarse de lo que se nos quiere poner enfrente

obstinadamente, nos ayudará a ver las cosas de mejor forma y comprender

ciertos comportamientos que históricamente han formado parte de las

potencias imperialistas.





Las revueltas populares en el Magreb y Oriente Medio se

dan dentro de un contexto de crisis estructural capitalista y la

adopción progresiva, por parte de Europa, de las conocidas recetas

neoliberales que tanto hemos conocido en América Latina. Somos testigos,

además, de cómo el pueblo en Grecia pasa a ser símbolo de resistencia

en Europa hacia dichas medidas neoliberales y cómo el crecimiento

económico de EEUU va en caída estrepitosa frente al ascenso económico

por parte de potencias como Brasil, Rusia, India y China (BRIC). Siendo

este último (China) un protagonista clave dentro de las potencias

ascendentes y que claramente se perfila como la potencia que podría

desplazar dentro del presente siglo a EEUU como potencia hegemónica.





No es casual que estos movimientos geopolíticos se estén

dando dentro de una zona geoestratégica de gran importancia como lo es

el Magreb y el Medio Oriente, y menos cuando una potencia como China

está teniendo una fuerte penetración económica en Africa y Medio

Oriente, concientes del acelerado apetito que está teniendo hoy el Gran

Dragón.





Seudo-revoluciones en el Magreb y Medio Oriente: Quema de pastizal controlado mediáticamente por la Gran Burguesía Occidental





Mucho se ha debatido sobre si lo que está pasando en el

Magreb y el Medio Oriente son o no verdaderas revoluciones. No obstante a

medida que pasa el tiempo no podemos ver más que un cambio de caretas,

ya que no hemos presenciado la caída de ningún Estado más que la caída

de gobiernos. Por tanto es erróneo calificar a estas revueltas populares

como verdaderas revoluciones.





Podrían tratarse más de situaciones pre-revolucionarias,

pero ni eso; las Masas carecen de una verdadera conciencia

revolucionaria y perceptiblemente se limitan a luchar por intereses

inmediatos (principalmente ligadas a la caída de sus gobernantes, no del

Estado ni mucho menos de su sistema económico), agravado aún por la

falta de dirección o vanguardia política visible. Lo que no quiere decir

que no haya elementos revolucionarios honestos que desearan un cambio

estructural del status quo, pero lo que más hay son reivindicaciones por

los intereses más inmediatos. Recordemos que las reivindicaciones

iniciales en Túnez no han sido por la caída de sus gobernantes, sino por

las alzas de alimento, las faltas de oportunidades, etc., justas

reivindicaciones populares, y que en algunos casos aún hoy lo siguen

manifestando.





Tanto en Túnez como en Egipto las reivindicaciones

populares siguen presentes, lo que nos habla esto de cierto impulso, y

debido al silencio mediático tienen más oportunidades de ser aplastados

por las clases dominantes locales.





Pero hagámonos las preguntas: ¿dónde están hoy los

“líderes opositores” que “lideraron” las protestas en Túnez y Egipto en

este nuevo escenario de reivindicaciones populares? ¿Aquellos “líderes”

están hoy liderando a las masas? O bien ¿se han quedado bien acomodados

en el lugar que apetecían?





Pero claro, lo que hemos visto en un principio es una

vergonzosa manipulación mediática y de masas por parte de los Grandes

Medios de Difusión Masiva y Grupos Opositores Oportunistas,

respectivamente. Que no queramos ver ello, es otra cosa.

Desde el punto de vista de las clases dominantes, claro que es una

revolución; pero desde el punto de vista de las clases dominadas, no es

ninguna revolución lo que está sucediendo en el Magreb y Medio Oriente.





“Revolución” porque las clases dominantes occidentales

están imponiendo su concepto de “democratización” y a la que denominan

la “era democratizadora”, supuestamente en beneficio de los pueblos,

siendo que en la práctica beneficia significativamente a las mismas

clases dominantes burguesas.





Podrá tener apariencia de ser una revolución, pero esa

apariencia sólo es alimentada por los Grandes Medios de Difusión Masiva

capitalistas, y que buena parte de la izquierda se han hecho eco.





A muchos de nuestros camaradas, como ejemplo, se les

olvida la flexibilidad que hay que tener en cuanto a nuestra política de

alianzas (estratégicas y tácticas) para perseguir objetivos comunes.





Por dar un ejemplo: que estemos a favor de la

resistencia afgana y, por tanto, de los talibanes – aunque muchos

quieran obviar ese nombre –, que están en contra de las fuerzas

imperialistas asentadas en su país o territorio, no quiere decir que

estemos a favor de sus intereses políticos o de alguna de sus

concepciones ideológicas. Lo mismo podemos aplicarlo con Gadafi.





Dichas alianzas no significa que dicha flexibilidad

pueda empujarnos a mantener alianzas estratégicas o tácticas con

nuestros principales objetivos políticos, ya que perderíamos total

credibilidad en nuestra lucha, cuando lo que se requiere es carácter y

claridad política para con nuestro pueblo.





Ahora bien, lo que hoy está sucediendo en Libia…





¿Debemos apoyar a grupos pro-monárquicos -el

levantamiento de esa miserable bandera lo dice todo- y que mantiene

vínculos con el imperialismo burgués occidental para poder lograr sus

objetivos? ¿No estamos siendo un poco inconsecuentes al adoptar una

posición que más beneficia los intereses imperialistas?





Otra cosa es que nuestro enemigo irreconciliable quiera

coquetear un poco con nuestros objetivos o nuestra lucha (lo que se

llama propaganda). Pero eso no es nuestro problema mientras no nos

perjudique o influya de alguna forma nuestras expectativas.





Por tanto no es sorprendente, dado el poder penetrante

de los Grandes Medios, que el común de la gente adopte posiciones

beneficiosas a la matriz de opinión que ha sido diseñada por los Grandes

Medios de Difusión Masiva para desviar la atención de nuestros enemigos

cardinales; tampoco es sorprendente que muchos en su oportunidad hayan

adoptado o sigan adoptando la opinión de que Chávez es un “dictador” por

haber supuestamente mandado a “disparar a su propio pueblo” en aquella

oportunidad del golpe frustrado en Venezuela el 2002, y que se demostró

que todo había sido un montaje de los Medios a favor de la oposición; o

que muchos adopten la opinión de que las FARC-EP es un grupo

“terrorista” o que hace “secuestros”, cuando en verdad se trata de un

verdadero ejército revolucionario y que en una guerra existen los

prisioneros de guerra, no los “secuestrados”.





Entendamos bien una cosa: los recursos propagandísticos

son un recurso utilizado para generar una respuesta a favor de los

intereses de las clases dominantes.

Pero hoy sí que nos sorprende el que muchos de nuestros camaradas,

acostumbrados a ser críticos con los Medios de “comunicación”, estén

adoptando las mismas matrices de opinión que los Grandes Medios de

Difusión Masiva nos han estado vendiendo con esto de las “revoluciones

democráticas”.





Ahora para la izquierda, por dar un ejemplo, Gadfi es un

“criminal que merece ser juzgado”, tal como plantean los imperialistas.

De la misma forma quizá siguen “levantados” contra los criminales del

genocidio cometido por Israel en Gaza entre el 27 de diciembre de 2008 y

el 18 de enero de 2009 (más de 1,300 muertos, la mayoría civiles).

¿Dónde están esos criminales hoy?





Caos dentro de la Izquierda





Las ideas dentro de la izquierda están lejos aún de

estar claras con respecto a lo que acontece en el Magreb y Medio

Oriente. Las hay desde las más complacientes hasta las más

contradictorias; desde las más contradictorias hasta las más

fehacientes.





Todos parecieran disparar por el solo hecho de disparar

sin detenerse a pensar que cada disparo se debe hacer con cierta

responsabilidad. Pero no sólo la responsabilidad debe estar en el que

dispara sino en el que facilita el espacio para poder disparar. Nuestros

medios aquí también tienen una responsabilidad que no hay que dejar

pasar. Al final de cuentas son nuestros medios quienes deben adquirir

una mayor responsabilidad.





Nuestros escritores, intelectuales o líderes asumen una

responsabilidad cuando escriben, pero pareciera que se han olvidado de

esa responsabilidad y se han inclinado por repetir el mismo discurso

cual genera esta multitud de aplausos en contra de Muamar el Gadafi o a

favor de las “revoluciones”, como queriendo buscar más los aplausos de

las distintas tribunas que poder sostener su responsabilidad para con

los suyos.





El punto no es ponerse a favor o en contra de Gadafi, el

punto principal es saber identificar y comprender los movimientos de

pieza imperialistas. ¿Nunca nos hemos puesto a pensar en la

“responsabilidad” que tienen los Grandes Medios de Difusión Masiva para

con las clases dominantes burguesas en no dejar pasar ideas

revolucionarias que atenten en contra de sus propios intereses? Es cosa

de agarrar cualquier medio burgués y nos encontraremos de que no hay

nada con lo que pudiéramos identificarnos; y si lo encontramos no será

para otra cosa que asombrarnos. De la misma manera, debemos aprender a

ejercer un control sobre las ideas a difundir y no ampararnos en el

paraguas de la “pluralidad de izquierda” para justificar cada uno de los

disparos que son hechos desde nuestras plataformas de izquierda.

¡¡¡Claro que necesitamos de la pluralidad, pero una pluralidad con

objetivos comunes y con responsabilidad!!! ¿Se imaginan un Partido

teniendo distintas posiciones con respecto a un solo hecho? ¿Se imaginan

a un Partido con más de un secretario general?





Pero hacen falta estos acontecimientos para poder ver la

mugre que hay por casa.

Es comprensible que algunos de los nuestros quieran ver que lo que está

pasando en Libia no tiene que ver mucho con lo “pasado” en Túnez y

Egipto, señalando, por ejemplo, de que se trate de una “operación”

planeada para “hacerla coincidir con el movimiento de protesta en los

países árabes” (Túnez y Egipto). O que las intenciones de EEUU y la OTAN

de intervenir militarmente Libia sea frenar las “revoluciones” o la

“ola revolucionaria” en el Magreb y Medio Oriente. Sin embargo, con

relación a lo primero, tiene mucho que ver, sólo que en Libia los Medios

no tienen cómo hacer para que les funcione la fórmula utilizada con

Egipto, al no haber masas concentradas día a día en el centro de poder

(la capital) como sí las había en Egipto y que obligaba a entregar

exageradas coberturas que hacía opacar todo lo demás. Es la razón de que

hoy en Libia se esté viendo mucho más detalles de lo que se podía ver

en Egipto.





También es comprensible que algunos adopten ideas dentro

de la izquierda tomadas desde sitios, agrupaciones o personalidades con

las cuales ya tenían cierta afinidad preconcebida.





Alguna de ellas:





Las revueltas en el Magreb y Medio Oriente “tomaron por

sorpresa” a los imperialistas, ya que “no pudieron prever” lo que iba a

suceder en estas regiones.





Los imperialistas “están detrás” de las revueltas pero no como “causantes” sino como conductores.





Las revueltas se han producido por la “falta de

democracia”, la “corrupción”, la “falta de derechos humanos”, la falta

de “libertad”, etc. (esta es la idea más común de todas y la que está

mucho más presente dentro de la izquierda; y “curiosamente” la que está

más presente dentro de los Grandes Medios de Difusión Masiva). Como si

de “democracia”, “corrupción” o “Derechos Humanos” pudiera comer el

hombre.





Las revueltas populares “hay que dejarlas correr”, ya

que las masas en ellas adquieren “experiencia en la lucha” lo que le

habría de inclinar a tomar conciencia de la necesidad de fundar el

Partido.





Pero también están las ideas contra-críticas y que sólo son enmarcadas dentro de las “teorías conspirativas”:





El absurdo de pensar de que “la CIA está detrás de las revueltas”.





El absurdo de pensar de que “las masas están siendo manipuladas”.





El absurdo de pensar de que “Wikileaks y Anonymous jugaron un papel significativo en la desestabilización de Túnez”.





El absurdo de pensar de que lo de Libia es una

“operación” planeada para “hacerla coincidir con el movimiento de

protesta en los países árabes”.





El absurdo de ver en las revueltas actuales “similitudes con las revoluciones de colores”.





Y no faltarán las consignas medias raras…:





“¡Fuera las manos imperialistas de Libia! ¡Por el triunfo de la Resistencia en Libia, abajo Gadafi!”





…Ni las ideas que levantan tan prodigiosamente los Grandes Medios de Difusión Masiva:





Gadafi es un “dictador” que incluso “bombardea” a su propio pueblo.

“Es muy tarde para hacer reformas” (en respuesta a los cambios desplegados por los gobernantes cuestionados)





Conclusión





Será muy interesante ver después que el foco de atención

se dirija a Yemen para que pueda “agarrar” de alguna forma a Arabia

Saudita, principal proveedor de petróleo de China. Si ha sucedido con un

aliado estratégico de EEUU, como Egipto ¿por qué no podría suceder con

Arabia Saudita?





¿Cuál será la posición china al respecto? ¿Seguirá

adoptando una postura pasiva mientras se esté amenazando sus propios

intereses?





http://stolpkin.net/

Fuente: http://www.nodo50.org/ceprid/spip.php?article1118







Envía esta noticia

Compartir esta noticia:
delicious 
digg 
meneame
twitter